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Leyendo las noticias, que cada vez me producen más tedio, tuve la gran suerte de ver las fotografías de Michael Kenna a quien debo agradecer lo mucho que he disfrutado haciendo esta entrada.
Las fotografías en blanco y negro, para mí, tienen algo especial que me seducen y Michael Kenna tiene una sensiblidad especial que queda reflejada en ellas. Os resumo su biografía: nació en Widnes, Inglaterra en 1953. Su familia era irlandesa católica de clase obrera y cuando tenía once años ingresó en St Joseph’s College (un seminario católico) en Inglaterra en el que estuvo siete años. Allí sintió que su vocación no era el sacerdocio; sin embargo, durante ese tiempo sintió que la pintura le atraía cada vez más. Durante un año asistió a Banbury School of Art (la Escuela de Arte de Banbury) donde estudió pintura, escultura, tejidos, orfebrería y además descubrió su verdadera vocación: la fotografía. En el año 1973 se matriculó en London College of Printing para ampliar sus conocimientos durante tres años.
La pintura seguía apasionándole pero era consciente de que no podría aportarle el dinero sufí ciente para vivir. Decidió empezar con la fotografía comercial sabiendo que con la publicidad podría conseguirlo:
Las fotografías en blanco y negro, para mí, tienen algo especial que me seducen y Michael Kenna tiene una sensiblidad especial que queda reflejada en ellas. Os resumo su biografía: nació en Widnes, Inglaterra en 1953. Su familia era irlandesa católica de clase obrera y cuando tenía once años ingresó en St Joseph’s College (un seminario católico) en Inglaterra en el que estuvo siete años. Allí sintió que su vocación no era el sacerdocio; sin embargo, durante ese tiempo sintió que la pintura le atraía cada vez más. Durante un año asistió a Banbury School of Art (la Escuela de Arte de Banbury) donde estudió pintura, escultura, tejidos, orfebrería y además descubrió su verdadera vocación: la fotografía. En el año 1973 se matriculó en London College of Printing para ampliar sus conocimientos durante tres años.
La pintura seguía apasionándole pero era consciente de que no podría aportarle el dinero sufí ciente para vivir. Decidió empezar con la fotografía comercial sabiendo que con la publicidad podría conseguirlo:
Michael Kenna sabe combinar y aprovechar su talento e inquietudes. No se resigna, aprovecha lo mejor en cada instante: “En la vida no tenemos suficientes horas para hacer todas las cosas que nos gustaría hacer. Pero tal vez sea una de las grandes lecciones de la vida contentarse con lo que estamos haciendo en realidad. Esa es una lección que me viene a la memoria con frecuencia”.
Su concepción de la fotografía y su método de trabajo reflejan su serenidad, humildad y tesón:
Sus horas preferidas para trabajar son inusuales, pero no para una persona solitaria y tranquila como él:
Michael Kenna ha logrado unir sus dos pasiones: ser un pintor en sus fotografías. Coincido con él en todas las declaraciones que ha hecho y siempre es gratificante encontrar profesionales como él.
Fuentes: Una luz en la oscuridad, A hombros de gigantes.
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