29/5/12

La familia Isaacson nos enseñan a hacer realidad nuestros sueños

La familia Isaacson  Betsy  Ghoste  Rowan y una amuga
Cuando leí el artículo El niño de los caballos (no recuerdo dónde), me recordó una preciosa película El hombre que susurraba a los caballos, lo inesperado fue que la historia era real.

Convergían tres elementos fundamentales para mí: la enfermedad de un niño, la tenacidad de sus padres por curarle o mejorar su calidad de vida y la presencia del caballo, un animal bello y entrañable, como medio para conseguir su objetivo.

El niño al que me refiero se llama Rowan y es autista, sus padres Rupert (periodista y escritor) y Kristin Isaacson y la yegua Betsy.

Esta historia empezó en el año 2004, cuando a Rowan que tenía dos años y medio le diagnosticaron autismo. El impacto emocional de Rupert y Kristin fue tremendo, probaron todas las terapias que existían pero ninguna funcionó. Y gracias a Internet obtuvo la respuesta. En junio del año 2009 E. Bouisset realizó este reportaje en el que Rupert relataba toda la historia:

Crecí entre Londres y los caballos, y me dedicaba a entrenar caballos para el salto y concurso completo. Pero cuando le diagnosticaron autismo a Rowan, pensé que sería peligroso que estuviera entre caballos, porque gritaría, correría y yo no le podría controlar. Así que le alejé de los caballos y yo mismo dejé de montar. Uno de mis sueños era montar con mi hijo. Por lo que pensé que debí decir adiós a este sueño.

Sin embargo, también me di cuenta de que cuando estaba en la naturaleza los problemas de hipersensibilidad de Rowan disminuían, por lo que pasábamos mucho tiempo paseando por el bosque de detrás de casa. 

Un día, Rowan decidió tomar otro camino del que hacíamos habitualmente y antes de que pudiera atraparle, entró en la propiedad de mi vecino donde cinco caballos estaban pasando junto a la valla. Se metió entre ellos, se tumbó y empezó a balbucearles…La jefa de la manada, ‘Betsy’, a quien yo conocía ya, se acercó a él e hizo el gesto conocido de sumisión en doma natural (bajar la cabeza y resoplar) de forma espontánea frente a Rowan. ¡Nunca había visto a un caballo realizar este gesto de forma espontánea! Entonces vi claramente que existía una conexión directa entre ambos. Pero pensé: "Esto es una tragedia, tiene la misma afinidad con los caballos que tengo yo, pero nunca podremos compartirla por culpa del autismo". Y me puse a llorar. 

Ese año también pasó algo más tenía que llevar una delegación de bosquimanos a Estados Unidos para protestar ante las Naciones unidas por unas expropiaciones ilegales de sus tierras. Esta gente africana tenía una gran tradición de sanación a través del trance, y aunque para una mente occidental esto pueda parecer raro, cuando estás en sitios así durante años y ves a gente enfermar y sanar mediante este tipo de chamanismo terminas por acostumbrarte. 

Algunos de los bosquimanos que vinieron conmigo eran maestros de sanadores en su cultura y se ofrecieron a realizar cierto trabajo con Rowan. Tuvo una reacción muy positiva al tratamiento y empezó a perder algunos de sus comportamientos obsesivos durante unos días. Pero en cuanto los bosquimanos se fueron, el efecto positivo desapareció. 

Rowan volvió a encerrarse en su autismo y no hablaba, cierto, pero, eso sí, quería volver a trabajar con los caballos. Montamos juntos (yo iba detrás) y casi instantáneamente su habla empezó a fluir. Era evidente que las reacciones más increíbles de Rowan habían ocurrido a caballo o junto a los sanadores bosquimanos…Entonces; ¿Por qué no ir a un lugar en el que se combinaran ambas cosas, un lugar en el que los caballos y la sanación fueran de la mano? ¿Existía, acaso, un lugar así? Empecé a navegar por internet para buscar información y lo encontré Mongolia.

La preparación del viaje duró algo más de dos años. Rowan era demasiado joven para emprender tamaña aventura, Rupert tuvo que convencer a Kristin que no estaba muy animada con la idea y necesitaban encontrar financiación. La financiación la obtuvo con los adelantos de los derechos editoriales del libro The Horse Boy (El niño de los caballos) que escribiría Rupert acerca de su experiencia. Mientras tanto Rowan y Rupert siguieron montando, esta vez juntos, a lomos de Betsy:

Descubrí que yendo más rápido lograba que hablara más. Incluso saltábamos. Tomé muchos riesgos. Montábamos durante largos periodos tres horas o más. Llevaba unas alforjas con pañales y ropa de recambio, porque la primera vez que defecó encima de la silla pensé: Vale, anota, debes llevar pañales. Y también llevaba juguetes, para que pudiera bajar del caballo y jugar. Hice todo lo que parecía funcionar. Incluso saltar cercados. Rowan no se asustaba, él me pedía que lo hiciera…Eso es lo que yo buscaba, que tuviera que escoger. Tenía que decirme a dónde quería ir, a qué velocidad, si teníamos que trotar un trote corte o largo…Le hacía tomar decisiones para que hablara. Además al montar le sujetaba con un tipos de presión que les gusta a los niños autistas…Es un abrazo, de hecho…. Así, íbamos de aquí para allá. Usábamos el ritmo del caballo para cantar o incluso le contaba los cuentos que más le gustan. 

Realmente yo no sabía nada acerca de las terapias del caballo…Lo único que sabía es que podía montar a caballo con mi hijo y esto funcionaba. Tenía que confiar realmente en Betsy en muchos aspectos. Tenía que apartarme en cierto modo y observar la interacción entre ella y Rowan y ser más bien un facilitador que un jinete. Mis conocimientos de los caballos y mi comprensión de su compleja forma de pensar creció muchísimo durante estos dos años”

Llegó el verano de 2007, Rowan, Rupert y Kristin junto con un equipo de filmación que rodaría un documental de la experiencia titulado “Over The Hills and Far Away” (Sobre las colinas y más allá) partieron hacia Mongolia.

Llevaban dieciséis caballos y una furgoneta. Los caballos habían sido seleccionados para que los nativos, conociendo la situación de Rowan, le aconsejaran un caballo u otro. Iban a ser largas jornadas de ocho o nueve horas montando, por tanto la comodidad y la confianza en la montura eran muy importantes. Esperanzados y recelosos también, comenzaron el viaje.

Hasta entonces, Rowan seguía siendo incontinente, tenía berrinches constantes y era incapaz de hacer amigos. Pero en la primera ceremonia, a la que acudieron nueve chamanes de toda Mongolia para sanarle, Rowan se volvió hacia un chaval mongol, abrió sus brazos y dijo: “hermano Mongol”, y le abrazó. “Nunca antes le habíamos visto hacer algo así”, relata Rupert.

Ese chaval era Tomoo, el hijo de Tulga, su guía. Decidieron que realizara con ellos el resto de la travesía. Y así, en Mongolia, Rowan hizo su primer amigo.

La parte final del viaje fue en Siberia: “Fuimos a Siberia porque en sus montañas vive la tribu de los Duka, la gente de los renos. Fuimos a visitar a estas gentes porque sus chamanes tienen la reputación de ser los más efectivos. Así que ascendimos hasta 3.000 metros de altitud, donde ellos pasan el verano. Estas tribus son nómadas, por lo que debes tener suerte para dar con ellos y, en caso de encontrarlos, el chamán tiene que aceptar tratarte, porque no siempre lo hacen…Así que había un montón de preocupaciones…"

El chamán de la gente de los renos era un hombre llamado Ghoste. Trabajó con Rowan durante tres días. Al término de estos tres días, anunció a los Isaacson que su hijo sería gradualmente menos autista hasta cumplir los nueve años y que a partir de ese momento, su incontinencia y sus pataletas cesarían:

Yo me mostré bastante escéptico, aunque esperanzado. Bajamos de la montaña y Rowan estaba realmente tranquilo. Se produjeron muchas situaciones propicias para que empezara a patalear- situaciones en las que normalmente habría tenido un berrinche-, pero no lo hizo. La noche siguiente, en la orilla del río que había junto a nuestro campamento, Rowan se puso en cuclillas y por primera vez defecó de forma voluntaria. Y se limpió él sólo. Esto fue…bueno, en términos ecuestres sería como ganar los juegos olímpicos…fue extraordinario para nosotros. En el año 2009 Rowan, es un niño diferente. Sigue siendo autista, pero tiene amigos en su barrio y muchas de las disfunciones que acompañaban a su autismo han desaparecido. Y todo se lo debemos a este caballo, a Betsy.

Los Isaacson dirigen desde entonces un pequeño centro de terapias ecuestres (The Horse Boy Foundation, en Texas, EEUU) especializado en tratar a niños con autismo. Sus instalaciones, están pensadas para que los pequeños puedan moverse por todo el recinto sin peligro. Además, no se rigen por unas estructuras fijas. Como reza su lema “We don´t know what we´re doing, and we have no program” (No sabemos lo que hacemos y no tenemos ningún programa). Y es que su objetivo es adaptarse a las necesidades de cada niño, sin límites y aprender cada día:

A mí no me importa si el niño monta durante cinco minutos o durante media hora, no me importa si monta una vez o cuatro…Hacemos cosas muy distintas…Salimos…Le permitimos al niño que vaya y venga, que juegue, que vuelva. Se trata de rebajar al máximo su nivel de estrés. Si hay menos estrés, el caballo también está más relajado y nosotros también. Además, en nuestro centro los padres no tienen por qué preocuparse por si sus hijos gritan o cómo se comportan. 

Les animamos a montar juntos porque un niño puede no querer montar conmigo porque no me conoce, pero le encantaría montar con papá o mamá, y podemos ocuparnos de que lo haga de forma segura. También animamos a los padres a que vengan con sus terapeutas. Así pueden probar sus terapias en nuestro centro, ya sea montando o en el campo, bajo un árbol, con las cabras, en un trampolín…les proporcionamos un entorno y el caballo. Y lo hacemos seguro para ellos. Estos niños necesitan nuestra ayuda. Si integramos un poco más todas estas disciplinas haremos más felices tanto a los caballos como a nosotros mismos. Ponerse al servicio de los demás es bueno...¡y, encima, seguro que nos divertimos”

Rupert ha conocido el lado elitista, arrogante y snob que envuelve el mundo del caballo y que ahora lo denomina el "lado oscuro". Este mundo también conlleva ternura, alegría y generosidad como está demostrando Rupert.

Actualmente Rowan va al cine, al colegio, le encantan los videojuegos y aprende cada vez más dada su curiosidad y capacidad de observación. Gracias a sus padres es un niño feliz.

Enhorabuena Rupert y Kristin por vuestra labor.

19/5/12

Alejandro Toledo: un gran profesional humanitario

Alejandro Toledo   Su  hija    Logotipo  
Estamos viviendo una época de crisis, no sólo económica, sino también de valores morales; pero hay personas como Alejandro Toledo que me alientan al observar su trabajo e implicación en este ámbito.

Alejandro Toledo es un reputado director de publicidad que ha realizado numerosos spots para Ferrero Rocher, Nissan Patrol, agua mineral Oulmes, Pepsi, el tráiler del Capitán Trueno entre otros muchos. Tiene su empresa en Los Ángeles donde reside gran parte del año.

Nació en Madrid en 1960, está casado y tiene tres hijos. Su situación profesional y personal es excelente; sin embargo gracias al anuncio que hizo para Caritas Madrid y que apareció el pasado 11 de abril, es cuando en España ha sido reconocido.

Según sus palabras: “El anuncio lo hicimos ya hace un año, pero, por falta de medios, no pudo publicitarse en los grandes medios, con excepción de alguna televisión local. Pasó inadvertido y me olvidé del asunto .Hasta ahora, que un medio de alcance nacional entrevistó al coordinador de Cáritas Madrid, Javier Hernando, y, de repente, nos hemos encontrado con toda una campaña de comunicación global y totalmente gratuita”.

La historia de la grabación de este anuncio aunque creo que la conocemos todos, os la recuerda Alejandro: "Yo bajaba por la calle Martínez Campos y a lo lejos veo a un tipo con el que había trabajado y que había tenido bastante éxito en el mundo de la publicidad. Le seguí para saludarle y de pronto le veo entrar en un comedor social. Me dije: '¿Y este tío qué hace aquí?'. Y entonces le veo salir con una bolsa de comida. Iba perfectamente vestido, con su bolsa de comida que acababa de sacar de Caritas. Me produjo un gran vuelco al corazón, ya que en un momento llegué a imaginarme a mí mismo en la misma situación… y me di cuenta de hasta qué punto todo resulta frágil. Me causó una enorme tristeza y rabia por lo injusta y dura que es la vida. Me produjo un choque tremendo y eso me llevó a involucrarme en este proyecto".

Todas las personas que han participado en la realización de este vídeo lo han hecho de forma gratuita por los demás (el trabajo está valorado en unos 40.000 euros). Alejandro puntualiza: "Los protagonistas son mi hija y un actor que conocí en la calle, en un semáforo, un malabarista, un maravilloso personaje con el que había rodado el videoclip de Nuestro amor será leyenda de Alejandro Sanz. Cuando le propuse hacer el video se mostró desde el primer momento dispuesto y luego se llevó muy bien con mi hija, hacen una pareja estupenda y el resultado está ahí".

Alejandro Toledo elogia la labor social de Cáritas Madrid añadiendo: "En España hay un sentimiento absurdamente antirreligioso que es chocante, con gente que rechaza a Cáritas simplemente porque es una iniciativa de la Iglesia. Eso es sectario. Es imposible que los que conocen de cerca el trabajo de Cáritas tengan una mala opinión”, por esto trata de despertar la conciencia y sobre todo de que les ayudemos a seguir realizando su trabajo.

Agradece a la Escolanía del Recuerdo del Colegio de Nuestra Señora del Recuerdo de los Padres Jesuitas su colaboración por haber intervenido en la música del video, además añade Alejandro “la Escolanía hace una labor impresionante, de hecho los niños tienen una asignatura que consiste en ayudar los miércoles a comedores, a ancianos, sirven la comida con las monjitas. Es maravilloso".

Enhorabuena Alejandro por este bello vídeo y por ser como eres:

10/5/12

Anthony Hopkins: una persona especial

Anthony Hopkins
Anthony Hopkins
Landscape (Paisaje)
Landscape (Paisaje)
Esta entrada es una especie de homenaje a Anthony Hopkins que con sus 74 años es un ejemplo a seguir para todos por su sensatez, humildad y generosidad.

No voy a comentar nada sobre su trayectoria cinematográfica, todos conocemos su filmografía y su excepcional forma de interpretar. Me centraré en sus dos facetas quizá menos conocidas: la pintura y la composición de música clásica.

Pintor 

El escritor Simon Hattenstone entrevistó a Anthony Hopkins en enero de 2010 y comentaba su peculiar estilo (antes de su primera exposición en Londres):

"Los cuadros de Hopkins son variados y variables. Van desde los paisajes tradicionales a imágenes mucho más oscuras. Una escena idílica que llama: campos de maíz con el cielo blanco y azul inspira tranquilidad, una cara roja como la sangre, resaltada en amarillo, sonriente y dura es más cómo me imaginaba que podría ser el trabajo de Hopkins: inquieto, triste, inolvidable".

Anthony respondía con toda franqueza a sus preguntas y no sólo sobre su pintura: "Con los años se instala una calma. Supongo que lo que estás observando es mi estado de ánimo o estado de ser".

A la última pregunta ¿Qué consejo les daría a los jóvenes? contestó: "La claridad y valentía, y simplemente seguir adelante con ella. Esa es mi filosofía. Dejar de tratar de impresionar a la gente hablando entre dientes, porque es aburrido. Que no pierdan el tiempo"

Anthony donó una serie de sus pinturas de paisajes a la biblioteca de San Antonio para su programa de alfabetización de niños, Born to Read con la intención de animarles a leer y escribir.

Compositor

En un principio se limitaba a improvisar en el piano en su casa solamente como placer, fue su esposa Stella la que le llevó a ampliar su pensamiento musical y el resultado final fue un concierto con la City of Birmingham Symphony Orchestra el año pasado.

Para el compositor Ben good: "Hopkins escribe con un toque formidable. La sensación es muy parecida a la de un hombre que ama hacer música, que escribe desde el corazón por instinto. Con ese instinto viene una comprensión profunda de la estructura de las obras más breves, en lugar de complejas formas sinfónicas. Hopkins desarrolla su trabajo de forma sutil y no se conforma con la mera repetición. Es lo suficientemente original como para forjar su propio camino".

Editó un CD titulado: Anthony Hopkins – ‘Composer’ en el que se incluyen sus composiciones: Orpheus, Amerika, Stella, Margam, Evesham Fair, Circus, Bracken Road, The Plaza y The Waltz Goes On.

Solidario

Donó 1 millón de libras para comprar partes de Snowdonia. Una vez constituido Snowdonia National Park recauda fondos y ayuda a la organización. Publicó también un libro para celebrar los esfuerzos que supuso su creación titulado Anthony Hopkins Snowdonia.

Es maestro voluntario en Ruskin School of Acting (Ruskin Escuela de Interpretación), en Santa Monica, California, donde él vive.

Colabora con Cancer Project, institución dedicada a la prevención del cáncer; con Starlight Children's Foundation (Fundación De niños Luz de las estrellas) dedicada a la atención pediátrica, la tecnología y el entretenimiento para crear programas que ayuden a iluminar las vidas de los niños gravemente enfermos y la de sus familias; con Midnight Mission (Misión de Medianoche) que ofrece un camino para la autosuficiencia a hombres, mujeres y niños que han perdido todo; con St. Francis Food Pantries and Shelters (Despensas San Francisco, Alimentos y Refugios) que tratan de alimentar el cuerpo y el espíritu prestando asistencia física y emocional para los necesitados. Su objetivo a corto plazo es: alimentar a los hambrientos y su meta a largo plazo: erradicar las causas del hambre: el desempleo, la adicción, la falta de programas de ayuda social, la violencia doméstica, etc. para asegurar que alcancen su independencia.

Es también un importante miembro de Greenpeace y a principios de 2008 apareció en una campaña televisiva hablando acerca de la continua caza de ballenas por parte de Japón.

Os dejo un resumen de la entrevista realizada por Carmen Aristegui el 15 de febrero del año pasado con motivo de la promoción de su película El Rito en la que habla de todo menos de la película:

Prefiero vivir en la incertidumbre. No tomo nada en serio porque al final no sabemos nada. 

Cuando estaba en la escuela era muy tonto, no me iba muy bien y no sabía lo que sucedía entonces me convertí en actor porque no había otra cosa que hacer y dije: esto me da para vivir. 

Soy una especie de navegante. Yo entré en el negocio de la actuación, de la música, de la pintura porque realmente no sé mucho de nada y eso me libera. 

Mi filosofía de hoy es que me siento con suerte de estar vivo. Vivimos en un mundo con tantos dogmas políticos y tanta seriedad. Todo el mundo quiere tener la certeza de algo. Todo el mundo quiere tener el poder, el gobierno, cosas y lo veo en las películas y en los actores que hablan tan serios de sí mismos, como si fueran dioses ¡Dios Mío!, hay una revolución en Egipto, las personas están muriendo de hambre. Yo no puedo tomar esta parte de mi vida tan en serio. Soy un ser humano por Dios. Hay un dicho muy bueno que dice: "Sé amable porque todo el mundo está luchando una gran batalla”. Cuando hablamos de estas personas que están hablando en la televisión o del trabajo que han hecho, etc. bostezo. 

No soy tan apasionado como otros, yo disfruto con lo que hago, pero tengo 73 años ya viví la vida. No somos nada, si vemos el cosmos no somos nada, ¡cómo puedo tomarme tan en serio yo!. 

Miro a las personas a los ojos directamente. He descubierto en los últimos años que no debo preocuparme tanto de los resultados de lo que hago, como actor, pintor o músico: Si no lo hago bien, entonces aunque los críticos digan algo bueno o malo no importa. Vivimos en una sociedad en la que todo (películas, actores de moda) pasa y desaparece rápidamente, es como la vida : alguien se muere y todo el mundo dice ¡qué triste! Y luego nadie se acuerda.

André Rieu quedó fascinado por la hermosa música de Sir Anthony Hopkins, su cálida personalidad y su humor. Espero que os guste esta maravillosa composición tanto como a mí.

4/5/12

¿Sólo un Día de la Madre?

Madre e Hijos
Escultura
Como todos sabemos y, por si lo olvidamos, todos los medios y comercios se encargan de recordárnoslo, el domingo que viene es el Día de la Madre.

¿Sólo un día al año deben ser agasajadas? Yo creo que no, para mí es un día más y en casa siempre ha sido así.

Mi Madre me lo enseñó de niña y ahora que soy madre se mantiene la tradición. No necesitamos regalos materiales. Todos los días recibimos mucho más: conversar, reír, escuchar sus inquietudes, sus ilusiones…tantos detalles que no puedo enumerarlos.

Lo que sí puedo afirmar es que, aunque suene a tópico, lo más bonito que me ha sucedido en mi vida es haber podido ser madre.

Coincido con lo que expresa la persona que más admiro la Madre Teresa de Calcuta en su poema:

ENSEÑARÁS

Enseñarás a volar...pero no volarán tu vuelo.
Enseñarás a soñar...pero no soñarán tus sueños.
Enseñarás a vivir...pero no vivirán tu vida.
Enseñarás a cantar...pero no cantarán tu canción.
Enseñarás a pensar...pero no pensarán como tú.
Pero sabrás que cada vez que ellos vuelen, sueñen, vivan, canten y piensen... ¡Estará en ellos la semilla del camino enseñado y aprendido!

Amaia Montero escribió esta preciosa canción con la que me siento identificada y que, como ella, se la dedico a mi Madre.

2/5/12

Los Nyangatom ¿podrán subsistir?

Poblado Nyangatom
Poblado Nyangatom
Madre e hijo Nyangaton
Madre e hijo Nyangaton
Hace algunos días me sorprendió un titular “Los últimos indígenas del Valle del Omo” se refería a los Nangyatom, una tribu etíope de cuya historia se conoce muy poco y desaparecerá si el Parque Nacional del Omo llega hasta su poblado.

Se cree que llegaron a su territorio actual hace unos cien años y que provienen del norte de Nigeria, de donde habrían emigrado con sus rebaños de vacas atravesando el norte de Uganda.

Encontré un reportaje realizado por Francisco Giner Abati (Catedrático de Antropología de la Universidad de Salamanca) el 4 de julio del año 2010 titulado “Los últimos indígenas - En busca de los Nyangatom”. En él nos cuenta su reconfortante experiencia con este pueblo que os resumo a continuación (podéis verlo entero en el enlace, aunque es un poco extenso merece la pena):

Viven en el valle del Omo (Etiopia, al sur de Sudan y norte de Kenia), su nombre significa “Los comedores de elefantes”, pero como ya no quedan paquidermos se dedican a la ganadería. Quedan sólo unos cientos de pastores Nyangatom. 

Su principal problema es la falta de agua potable ya que como los pocos manantiales que quedaban se han ido secando, las madres y las hijas van cada día a buscar agua (tardan en ir una hora y otra para volver) para ellos y las cabras. 

Conocen la planta Maerua subcordata cuya raíz utilizan para aclarar el agua del río: cortan y pelan la raíz con la que remueven el agua turbia haciendo que las partículas de lodo permanezcan en el fondo dejando el agua clara. Sobre todo la utilizan cuando la lluvia arrastra más barro al río. 

Suele llover en abril y mayo, en junio quedan ya pocos campos verdes. Julio, agosto y septiembre son meses secos. De noviembre a marzo trasladan el ganado a lugares más altos en la montaña hasta que vuelven de nuevo las lluvias. 

Además deben estar alerta porque los TurKana que viven al otro lado de las montañas de Kenia por la noche les roban sus ganados. 

Son diferentes cultural y lingüísticamente de sus vecinos. 

Además de ganaderos se han convertido en agricultores Cultivan sorgo (parecido a la caña de azúcar), maíz y judías. El ganado se alimenta de los pastos que cultivan los Nyangatom aprovechando las inundaciones periódicas del río Omo en las llanuras de su ribera, así como de los pastos que crecen tras las lluvias, los meandros llevan ricos limos que fertilizan sus cosechas.

El gobierno de Etiopia consideró las inundaciones como una gran catástrofe solicitando ayuda internacional aunque a ellos nos les llegó ninguna, tampoco la necesitan porque para ellos las inundaciones son una bendición del cielo que han hecho posibles mayores cosechas

Han sabido aprovechar la biodiversidad del valle del río Omo durante cientos de años. Son buenos pastores y excelentes botánicos dada su convivencia con los animales durante muchas generaciones 

Cuidan mucho la decoración corporal. Las mujeres amontonan kilos de collares hechos con semillas de color marrón alrededor de su cuello y adornan sus muñecas con pulseras de metal. Cuando consiguen cuchillas se afeitan la nuca, las sienes y la parte anterior de la cabeza dejando pelo sólo en el centro. Perforan el pabellón auricular para sus numerosos pendientes y el labio inferior para insertar un adorno. Los tatuajes forman parte de su embellecimiento. 

Los hombres se dividen en cuatro grupos: los de los elefantes, los búfalos, las avestruces y los antílopes. En esta ocasión el Jefe del poblado pertenece al de los elefantes y es quién lleva la economía doméstica. Se turnan y cada grupo tiene una ceremonia a través de la cual entregan las vacas al grupo siguiente. 

Cuando una persona muere en el campo su cuerpo es abandonado a las hiena y a los buitres, la naturaleza se ocupa de los cadáveres, si fallece en el poblado si se realiza un enterramiento. Cuando se trata de un gran hombre lo entierran en el corral de las vacas y se sacrifican bueyes, reuniéndose a los dos años para un nuevo banquete. 

Cuentan las estaciones pero no los días. 

Para casarse se entregan 20 vacas al padre de la novia y 50 más si tienen hijos adultos, por ello si nacen hijas será más fácil pagar la deuda al suegro.  

Aquí aun no han llegado los misioneros: “Sólo el cielo es grande” esta es toda su religión

Cuando acaban las labores cotidianas cantan y bailan siendo la parte más festiva de su existencia. En los grandes momentos de la vida como nacimientos, bodas y ritos de paso la celebración se escenifica siempre con cantos y danzas 

Al finalizar el día los rebaños regresan a sus corrales, los niños se afanan por beber leche de las cabras recién llegadas, exprimen las ubres hasta que la leche salpica sus manos que chupan glotonamente, las niñas regresan de buscar agua y las mujeres muelen sorgo para la cena. 

El Parque Nacional del Omo alteraría su rica biodiversidad cuyo objetivo es exponer al turismo esta riqueza ecológica tan bien preservada. Ya se está marginando a las tribus para alejarlas del parque restringiendo su acceso a las zonas donde están los animales salvajes y podrían ya haberles hecho firmar con engaño su propia exclusión a cambio de nada. 

Podrían considerarse a los Nyangatom como ocupas ilegales de su propio país 

Si los pastores pierden su ganado y son alejados de su territorio sus vidas se transformaran y sus tradiciones se perderán para siempre Los Nyangatom son una minoría y luchan contra la adversidad en condiciones extremas sin destruir la naturaleza y preservando la biodiversidad.

Las personas como Francisco Giner que se desplazan para que podamos conocer otras culturas merecen todo mi respeto; sin embargo, detesto a los que pretenden y logran utilizar estos pueblos como simples elementos curiosos con fines de lucro.

Os recomiendo la película Los últimos días del edén cuya temática es similar y espero que exista todavía un poco de cordura: los Nyangatom no deben ser desplazados, al contrario son un ejemplo a seguir.

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