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Estamos en Semana Santa la fiesta más alegre para los creyentes.
Parece una contradicción dado el ambiente serio y de sufrimiento de Cristo que envuelve esta Semana; sin embargo, mi querida Madre Ascensión que tiene 80 años y está ya jubilada (Dominica de La Anunciata) me desveló la verdad hace bastantes años.
Llegaban las vacaciones y le dije: “Madre, estas vacaciones no me gustan porque son muy tristes”. Ella me respondió: “¿Tristes?, pero Chon si son las más alegres. Por fin Jesús dejará de sufrir y volverá al cielo para velar por nosotros y ayudarnos. Además, cuando pase el tiempo, nos estará esperando. ¿Te imaginas lo bien que nos lo pasaremos con Él?”
En ningún momento me habló de muerte. Todavía con sus ochenta años sigue hablando de vida y, aunque su salud va deteriorándose y desea que Dios la llame ya para reunirse con Él, jamás pierde su sonrisa y sentido del humor.
Nunca he participado como cofrade en ninguna procesión; sin embargo, me admira esta tradición y el fervor de todos los que la mantienen viva.
Las procesiones empezaron en algunas de nuestras comunidades el pasado Viernes de Dolores, aunque ayer Domingo de Ramos fue el primer día de la Semana Santa cristiana.
Durante toda esta Semana habrá procesiones entre las que destacan: la Procesión del Silencio el Miércoles Santo, la Procesión del Jueves Santo, la Procesión del Santo Entierro el Viernes Santo y la última, el próximo Domingo de Resurrección, la Procesión del encuentro o Procesión del Resucitado según las comunidades.
Claudio Rodríguez nos deja en su poema las palabras que hubiera dicho Cristo:
En este video que tiene como fondo musical La Saeta, poema incluido en el libro Campos de Castilla, coincido con Antonio Machado en minimizar la sangre, el sufrimiento y la muerte centrándonos, según mi opinión, en la verdadera esencia de la Pasión de Cristo: La Vida
Parece una contradicción dado el ambiente serio y de sufrimiento de Cristo que envuelve esta Semana; sin embargo, mi querida Madre Ascensión que tiene 80 años y está ya jubilada (Dominica de La Anunciata) me desveló la verdad hace bastantes años.
Llegaban las vacaciones y le dije: “Madre, estas vacaciones no me gustan porque son muy tristes”. Ella me respondió: “¿Tristes?, pero Chon si son las más alegres. Por fin Jesús dejará de sufrir y volverá al cielo para velar por nosotros y ayudarnos. Además, cuando pase el tiempo, nos estará esperando. ¿Te imaginas lo bien que nos lo pasaremos con Él?”
En ningún momento me habló de muerte. Todavía con sus ochenta años sigue hablando de vida y, aunque su salud va deteriorándose y desea que Dios la llame ya para reunirse con Él, jamás pierde su sonrisa y sentido del humor.
Nunca he participado como cofrade en ninguna procesión; sin embargo, me admira esta tradición y el fervor de todos los que la mantienen viva.
Las procesiones empezaron en algunas de nuestras comunidades el pasado Viernes de Dolores, aunque ayer Domingo de Ramos fue el primer día de la Semana Santa cristiana.
Durante toda esta Semana habrá procesiones entre las que destacan: la Procesión del Silencio el Miércoles Santo, la Procesión del Jueves Santo, la Procesión del Santo Entierro el Viernes Santo y la última, el próximo Domingo de Resurrección, la Procesión del encuentro o Procesión del Resucitado según las comunidades.
Claudio Rodríguez nos deja en su poema las palabras que hubiera dicho Cristo:
Esta es mi libertad y mi condena
Es mi condena y vuestra salvación
Y la injusticia será vida a vida,
Rebeldía, y amor y sacrificio.
Así lo quiero, así. Vedme ofrecido.
Y mi cruz será cántico. Y mi muerte
vuestra resurrección.
En este video que tiene como fondo musical La Saeta, poema incluido en el libro Campos de Castilla, coincido con Antonio Machado en minimizar la sangre, el sufrimiento y la muerte centrándonos, según mi opinión, en la verdadera esencia de la Pasión de Cristo: La Vida
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